Si tienes un jardín (un pedazo de parcela, o terraza o incluso un pequeño balcón) seguro quieres que esté lleno de naturaleza y verdor. Grama y flores siempre hacen falta pero ¿qué tal el poder curativo y armonioso del agua? Sin duda lo convertirá en un espacio completo y lleno de vida. Y sí, es posible tener una ¡sin importar que tan pequeño sea tu terreno!
Existen miles de modelos y alternativas que se pueden adaptar con facilidad al espacio y al estilo o diseño decorativo, desde un espacio moderno, hasta uno más orgánico. Te invitamos a leer hasta el final y dejarte inspirar con cada una de estas imágenes.
Otra de las razones que motivan a las personas a incluir fuentes de agua en el jardín, es que sin duda son perfectas para la relajación, para tener un contacto aún más cercano con la naturaleza. Por ende, este tipo de fuentes pueden ser pequeñas e incluir materiales como el bambú.
Este tipo de fuentes con bordes bien definidos, se usan mucho para elevar la estética del paisaje, son perfectas para los jardines frontales, puesto que lo primero que se ve en la entrada principal, es una imponente fuente y chorro de agua con potencia.
Como comentamos anteriormente, las fuentes siempre se roban todas las miradas en los espacios exteriores y si quieres que sea un punto focal, entonces puedes optar por un diseño como el que nos presenta Junior Arquitectos, moderno donde la fuente tiene diversos puntos de salida y una vez que es encendida puede variar su intensidad y tamaños, produciendo un espectáculo digno de presenciar.
Otra idea para colocar una fuente en el jardín se basa en los estanques,como su palabra lo indica es un espacio donde está ubicada el agua, pero no tiene ningún tipo de moviente ni corriente, cosa que no es nada recomendable, puesto que las aguas estancadas solo atraer plagas. Para esto coloca una fuente o caída de agua, puede ser del tamaño que gustes en uno de los extremos con un sistema que permita que el agua siempre se mantenga fluyendo.
Las fuentes se pueden conseguir en cualquier material que desees, pero ninguno será tan eficiente y duradero como la piedra, puedes usarse no solo en la caída propiamente de la fuente, sino en toda la estructura, de este modo te garantizas una durabilidad, prácticamente de por vida.
Las caídas de las fuentes, son tan diversas como modelos existen, dependiendo del diseño y la inclinación, el agua caerá de manera característica, sin embargo si el diseño de tu jardín es un espacio moderno, y buscas que la fuente tengas el mismo estilo, procura que la fuente tenga un estilo de caída tipo manto de agua,se mantendrá suave y sutil pero siempre con la finalidad de una fuente.
Para darle un efecto de mayor naturalidad al jardín, consigue que tu fuente, no solo se quedé ahí, sino que haya un recorrido por toda el área como una especie de riachuelo, que evidentemente tendrá un ciclo al punto de regreso.
Con esta idea cerramos y demostramos que una fuente puede existir en cualquier tipo de jardín, desde uno enorme hasta uno pequeño. Recrea un sector de relajación con una fuente de piedra, muy sencilla y orgánica pero que incorpora el elemento agua.
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