10 ideas geniales para decorar tu patio con adoquín y piedra

Jose María Salas Vallejo Jose María Salas Vallejo
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Los adoquines los usaba el hombre en la antigüedad para ejecutar el empedrado de sus caminos. Históricamente se han utilizado las rocas que se encuentran en la naturaleza y  que se extraen en canteras como son el granito y el basalto, por su gran resistencia y por su extraordinaria sencillez a la hora de tallarlas y cortarlas. Estos dos tipos de adoquines de roca se siguen utilizando actualmente, pero también muchas otras ejecutadas con materiales artificiales como el cemento y el hormigón para que su fabricación sea industrializada en serie. Ni que decir tiene que la belleza de un adoquinado de granito no lo tiene un material artificial, el granito y los adoquines de materiales artificiales se colocan en la obra artesanalmente como toda la vida se ha hecho, pero el granito tiene además la cualidad de que dura casi eternamente.

Un pavimento atemporal

Los adoquines de piedra, alternados con tierra y algo de verde, como césped o plantas, son una composición perfecto para cualquier suelo exterior, evocador, por el que no desees que pasen los años. Un espacio perfecto al aire libre para relajarte, especialmente recomendable para climas calurosos, en los que desees que el suelo transpire. Los climas más húmedos acompasan mejor con adoquines de granito, e igual sucede con las partes cubiertas de tu jardín.



1. Adoquines de piedra irregulares

En una casa de campo uno de los espacios que más tiempo se permanece en ellos son los jardines o los patios. Son los sitios al aire libre donde se celebran comidas con la familia y amigos y donde juegan los niños o donde nos sentamos a disfrutar del aire y los rayos del sol. Si el suelo no tiene pavimento y llueve sobre tierra, no lo podrás utilizar. La solución es un patio con pavimento de adoquines de piedra irregulares con este tan maravilloso.

2. Adoquines y césped

Un uso idóneo para los adoquines es emplearlos para crear zonas de estar y de paso en los patios ajardinados. La ejecución de estos pavimentos admite variaciones, una vez escogido el adoquín de piedra que elegimos en base a su dimensión, color y textura, debemos decidir el rejuntado para su colocación, ya que las juntas pueden ser muy estrechas, o pueden ser mucho más anchas para conseguir un efecto estético más atractivo. 

3. Contraste del suelo con el muro de piedra

Aquí podemos ver el patio con el pavimento de acceso de losas de piedra de pizarra con un simulado desorden en su disposición. Sobre ellas grandes baldosas indican el paso más adecuado. El contraste entre el negro y el ocre son atractivos, pero se incrementa por el muro de piedra de mampostería de un color claro del cerramiento exterior de la casa que limita el camino y nos conduce a los escalones de acceso a la casa. 

4. Juego con el césped

Esta imagen es la de un patio con césped y su atractivo color verde que está cubierto puntualmente por unas grandes baldosas. Estas nos conducen hasta la zona pavimentada con un adoquinado de piedra de granito en gama de grises, que además de realizar su cometido de pavimento, consigue que la fachada principal de la casa a la cual se le ha aplicado un color blanco liso cobre un atractivo singular por el contraste que se produce.

5. Adoquinado falso en el acceso a la casa

Otra opción para un pavimento de adoquines es hacer un adoquinado falso en el acceso a la casa que en este caso se ejecuta con mortero de cemento, imitando su geometría y el despiece de sus componentes creando falsas juntas longitudinales y transversales, para tener una similitud al adoquín de piedra. Su mérito es que es un método más corto de ejecución, pero no tiene el efecto estético tan atractivo como uno de verdad.

6. Vestíbulo con adoquines de piedra como baldosas

Para el vestíbulo de una casa rural como la que vemos en la imagen se pueden usar adoquines de piedra, que en verdad son como baldosas. Se trata de adoquines de piedra de gran formato muy bien ejecutadas sus piezas y excepcionalmente bien pulidos, por lo que podrían pasar por ser baldosas de gres a simple vista. No obstante para este tipo de espacios rústicos es más adecuada la textura del pavimento de adoquines de piedra.

7. Junto a la piscina

Cuando colocamos un pavimento de adoquines perimetralmente a la piscina que puede ser de distinto tamaño cada uno de ellos o de igual tamaño se consigue un efecto estético eficaz, rústico y funcional. El adoquinado impide que el agua de la piscina que tiene cloro cuando salpica llegue al césped. Además la distinción visual del adoquinado y el agua es un componente de seguridad que evita accidentes. 

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8. Formas geométricas

El patio en la entrada de esta casa vemos que lo han diseñado con un pavimento de adoquines con formas geométricas de una manera muy sencilla. Basta con conjuntar un adoquinado de piedra de granito gris con un granito rosa en las cenefas longitudinales y peldaños, solamente con esos dos colores le da un gran atractivo a ese espacio, además con el contraste estaremos indicando las diferencias de nivel y las zonas de paso.

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9. Un trabajo manual y rústico

Hoy día los adoquines, sean de piedra de granito o de material artificial, su colocación es manual, de un modo similar al que se hacía hace muchos siglos. Primero se compacta el terreno, luego se hace una solera de hormigón en masa de unos 10 centímetros y sobre la solera una base de arena y cemento y sobre ella se ponen uno a uno los adoquines, con martillos de goma se les da para nivelarlos sin dañarlos y se dejan juntas anchas que se rellenarán con lechada de mortero de cemento. El efecto tiene esa toque de antiguo pero maravilloso.

10. ¡Adoquines hasta en las sillas!

El atractivo de los adoquines los convierte en conjuntos estéticos fabulosos. El adoquinado se transformó en mosaico en el que poco a poco las piedras se convirtieron en vidrios de colores y de menor tamaño. Y con esa transformación vemos muebles decorados como esta mesa de jardín, cuyo tablero y el respaldo de las sillas están ideados con adoquines rústicos. 

Más inspiración

Tu jardín puede ser el mejor salón al exterior en el que ponerte cómodo y disfrutar de una dosis extra de aire libre. Un suelo de adoquines, en la zona de asiento o un perímetro con adoquines de piedra alrededor de la piscina, le otorgarán un estilo propio, con acabados rústicos, que se integrarán a la perfección con plantas, árboles y todos los elementos que habitan en un jardín o patio.

¿Buscas más ideas para decorar un patio pequeño? Lee este otro libro de ideas: ’27 ideas para que tu pequeño patio sea acogedor’.

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