El baño de la casa se ha convertido en un espacio que no sólo cumple con sus funciones prácticas de aseo personal, sino que también es el lugar, que gracias a su intimidad y privacidad, nos permite relajarnos y renovarnos, para entrar en contacto con nosotros mismos.
Dentro de los estilos de decoración que ofrecen un ambiente sereno y acogedor, está el rústico; perfecto para transformar nuestro estado de ánimo, gracias a la naturalidad de los elementos que caracterizan a este estilo tan único y con gran personalidad.
En el libro de hoy, hemos seleccionado 15 diseños de baños rústicos, con ideas grandiosas que puedes adaptar para la decoración del tuyo.
Si hay algo que luce espectacular en un baño rústico, son las vigas de madera en el techo; ya sean nuevas o recicladas, incluirlas en el ambiente será la total diferencia en su decoración.
Como mencionamos en el párrafo anterior, la madera y la piedra son los grandes protagonistas del espacio. Puedes combinar paredes de piedra y pisos de madera, la personalidad que adquirirá tu baño será incomparable.
Los azulejos cerámicos aportan gran belleza a la ambientación de un baño rústico. Aquí se pueden usar en las paredes y en el piso y añadir piezas en madera como la superficie del lavabo o muebles de apoyo.
Los colores que deben prevalecer en el espacio, deberán ser en tonalidades cálidas, similares a los colores de la tierra, pero no olvides incluir tonos claros para que el ambiente sea luminoso, una característica de este estilo que nos remite a lo natural.
Para darle un toque más cálido y entrañable, en los baños rústicos son bienvenidas las piezas de estilo vintage, que nos remiten a tiempos pasados. Su apariencia desgastada, sobre todo en aquellas que son de madera, aportan mucho valor a la decoración.
Los baños rústicos tienen la capacidad de relajarnos al instante, gracias que se diseñan mayormente con materiales naturales como la madera y la piedra, lo cual hace que el ambiente sea relajado, cálido y acogedor, siendo éste el punto clave.
7. La importancia de la presencia de las tinas
Las tinas tienen un lugar especial en los baños rústicos. Sus formas delicadas, sobrepuestas en el piso y con la capacidad de poder elegir el material, como por ejemplo la piedra, pueden lograr ser las protagonistas del espacio.
8. Una iluminación acogedora
Los baños sin importar su estilo, necesitan una buena iluminación natural, pero debe ser reforzada por un diseño de luces con toque cálido para enfatizar el concepto, de estar en un espacio acogedor que relaje al máximo.
Así como la madera y la piedra son materiales característicos de estos baños, los detalles en hierro forjado lucirán sensacionales. Estos pueden estar por ejemplo en el marco del espejo, con lo que adquirirá mayor presencia y encanto.
Al buscar enfatizar lo natural, los baños rústicos requieren de accesorios confeccionados en las mismas características, por lo que las cestas de mimbre tejidas son especialmente privilegiadas. En ellas se pueden colocar toallas y artículos de higiene personal, ayudando a mantener organizado el espacio de forma original.
Tal vez no deseas llenar el baño con texturas en las paredes o el piso, pero sientes una atracción por este fascinante estilo. La buena noticia, es que puedes incluir piezas para darle este toque tan especial al baño, como por ejemplo a través del lavabo. Observa lo espectacular que luce esta pieza en madera maciza, sobre el muro de gresite en tonos tierra:
Si tu baño es pequeño, puedes colocar repisas de madera como las que vemos en este diseño, que combinadas con los azulejos y el detalle de madera en la zona del lavabo, son suficientes para otorgarle el estilo rústico a la decoración.
13. Rústico pero muy elegante
Este baño es simplemente espectacular. Observa cómo cada material representativo del estilo se encuentra presente, además de sus colores característicos y la sensación de calidez y confort que transmite.
Para añadir mayor luminosidad al baño, la zona del lavabo es uno de los puntos más atractivos con los que cuenta el baño. En este diseño, el frente del lavabo está revestido por diminutos azulejos café, que contrastan con elegancia frente a la elección de las piezas decorativas que componen la superficie del lavabo: metales brillantes, un espejo minimalista y la presencia vibrante de las flores amarillas, se conjuntan para crear una decoración exquisita.
Sin importar el tamaño del baño, hemos podido comprobar que con detalles característicos, como la presencia de la madera, la piedra, los accesorios de origen natural, una buena iluminación y toques de vegetación, se puede lograr una ambientación rústica sin igual. Lo importante, es que tengas claro qué es lo que puedes cambiar en tu baño, cuánto quieres invertir y adaptar estas sugerencias a tus necesidades y gustos.
¿Te animas a llenar de calidez el baño de tu casa?
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