10 salones sencillos en los que disfrutar al máximo

José Manuel Peñalver Romero José Manuel Peñalver Romero
contemporary contentment, ZERO9 ZERO9 Minimalistyczny salon
Loading admin actions …

El estilo minimalilsta se caracteriza por una extrema sencillez en la decoración desprovista de cualquier tipo de ornamento o sofisticación, dando protagonismo al vacío y a los espacios despejados. Las formas y los colores son simples y planos y se tiende a simplificar al máximo la presencia de elementos decorativos y los existentes se agrupan bajo un mismo criterio. En los salones minimalistas los muebles se reducen a lo esencial, cuanto menos, mejor; o dicho de otro modo, menos es más. A la hora de decidirse por este estilo es necesario hacer un ejercicio previo de análisis de las necesidades de almacenamiento ya que la idea es descargar el espacio de armarios o estanterías y quedarse con lo imprescindible. En un salón minimalista los muebles han de ser integrados y funcionales, requiere orden y disciplina y a cambio ofrece una atmósfera relajada y pura que no se encuentra fácilmente en otros estilos. El color blanco es uno de los dominantes y el cristal uno de los materiales más empleados. ¿Te apetece adentrarte en la mínima expresión de la mano de homify?

El ladrillo es bello

homify Minimalistyczny salon

A un paso de la Sagrada Familia de Barcelona, encontramos este edifico rehabilitado. En el salón de una de sus viviendas vemos cómo conviven la sencillez de un mobiliario minimalista con el revestimiento en ladrillo en paredes y techo. Los tonos blancos, sin adornos, de la mesa, las sillas y mueble bajo y las formas simples de los sofás y la alfombra se comunican entre sí al abrigo de la calidez de los tonos tierra del ladrillo.

Luz, sólo luz

Como si de un salón futurista se tratara, en este primer ejemplo mostramos un salón comedor que apuesta completamente por el blanco en paredes, suelos y techo. También en los muebles, de líneas cúbicas sencillas y rectangulares. No hay ni cuadros, ni armarios, ni estanterías. Por no haber, no hay ni cortinas. ¿Para qué? En esta atmósfera, la vida tiene mucha más presencia y unas pocas plantas cobran mucha más relevancia. El blanco es el gran conductor de luz. Y la luz, lo envuelve todo. 

Corrección y orden

Este otro ejemplo incluye en su decoración algún que otro elemento más. Los profesionales de Estudio Geya diseñaron un salón en el que abunda el espacio y las paredes blancas y al que se incorporan unas discretas baldas y un mueble bajo de líneas sencillas. Dos mesas de centro, igualmente blancas, lejos de romper el espacio, se integran en él y en todo el conjunto del salón. El techo en marrón ceniza pone la nota de color que puedes complementar incorporándolo también en algún que otro cojín. Sorprende la ventana, a la altura del suelo, detrás de los sofás.

La madera es bella

Hasta Amsterdam nos trasladamos para contemplar la sencillez de este salón. Sin apenas mobiliario, sólo un sofá y un mueble bajo a lo largo de una pared de ladrillo, todo es espacio en esta acogedora estancia. Espacio y luz natural gracias al mirador y la ventana que hay a su lado. Sólo la madera de sus vigas captura momentáneamente la atención pero de forma muy discreta.

Sin caer en la tentación

En este otro ejemplo, la decoración parece permitirse una pequeña incursión en el espacio minimalista. Unos cuadros étnicos, un mueble estantería, una alfombra y ciertos tonos oscuros más aparecen pero sin llamar mucho la atención. Cuando el espacio es amplio, como en este caso, no hay invasión del mismo, por lo tanto la tentación de incorporar más elementos decorativos está bajo control.

Salón con aires de exposición

Este otro salón parece aprovechar el estilo minimalista para querer convertirse en una pequeña galería de arte. El cuadro modernista que preside la estancia gobierna todo el espacio concedido por los sinuosos sillones y la mesa de cristal. Una pequeña zona de bar aporta la nota chic a este pequeño museo en casa.

¿Vacío o paz?

White Paper, 9cm 9cm Minimalistyczny salon

Cualquiera iría añadiéndole cosas a este salón. Sin embargo, ya tiene todo lo que necesita. Quizás la intención sólo sea convertirlo en un espacio para ver la tele. O quizás la necesidad real es que no se necesita nada más. En eso se basa el minimalismo, en reducirlo todo al máximo y quedarse sólo con lo imprescindible. Según la naturaleza de cada uno, esto puede interpretarse como sensación de vacío o como sensación de paz.

El sol como invitado

Vivienda, DECLASE DECLASE Minimalistyczny salon

Dos cuadros, una mesa, una silla, una pequeña estantería y un atractivo sofá. Ese es todo el mobiliario de este cálido y acogedor salón. ¿Y para qué más? Si cuenta hasta con los rayos del sol que entran desde el balcón como grandes invitados. E incluso con un suelo de madera natural que lo hace más acogedor todavía. Menos es más, no cabe duda.

Creando espacio

Sobre el minimalismo se pueden crear muchas opiniones, e incluso hacer alguna crítica. Lo que no se podrá reprochar nunca es que sea un estilo caro. Menos muebles, menos inversión. Eso sí, si queremos calidad, aunque sea en pequeñas dosis, algo sí que tendremos que rascarnos el bolsillo. En esta imagen vemos lo que podría ser cualquier salón de una vivienda actual de dos o tres dormitorios. Volvemos a las líneas rectas y a los colores blancos, dejando espacio a un ambiente despejado y acogedor

Las mil y una noches en el salón

contemporary contentment, ZERO9 ZERO9 Minimalistyczny salon

El minimalismo, al emplear pocos elementos decorativos, si uno de ellos tiene una marcada personalidad, se convierte en el estilo dominante. El de la imagen podría ser un salón cualquiera, con un mobiliario más o menos moderno, pero las tres lámparas verticales evocan una atmósfera oriental que se adueña del salón situándolo en cualquier lugar dentro de las mil y una noches.

Si quieres conocer otros estilos de salón puedes visitar este enlace.

Chcesz zbudować lub wyposażyć dom?
Skontaktuj się z nami!

Najważniejsze informacje z naszego magazynu